GUANTES – Imprescindibles!

las manos deben protegerse siempre con guantes

Llega el buen tiempo y dan (más) ganas de pillar nuestras monturas e ir a todos lados subid@s en ellas. Pero el calor hace que pensemos en prescindir de algunas prendas esenciales para nuestra seguridad y sacrificarlas en aras de la comodidad y la frescura. El casco es obligatorio por ley, y pronto lo serán también chaqueta y guantes (con su correspondiente homologación). Queremos recordaros que, aunque las temperaturas suban, el asfalto sigue siendo igual de abrasivo que en invierno y que es muchísimo mejor sudar un poco que dejarnos (literalmente) la piel en él. Ir en moto siempre es más cómodo y placentero pero nos hace muy vulnerables en la carretera y no deberíamos ir desprotegid@s sólo porque hace calor…

Hoy os hablaremos de los guantes tanto de invierno como de verano, de cómo elegirlos, de qué deben tener y de que podéis prescindir…a ver si al final de este artículo les habéis cogido algo de cariño y optáis por no olvidároslos en casa, que al fin y al cabo si, desafortunadamente, llegáis a caer las manos serían lo primero que tocarían al suelo y los echaríais de menos…y mucho!

ASÍ QUE NO OS DEJÉIS LOS GUANTES!

DISEÑO Y TALLAS DE GUANTES

Lo primero que deberéis hacer es aseguraros de la talla. Aunque hayan medidas estándar, cada fabricante puede variar un poco dependiendo del patronaje y también en función del material o materiales en los que estén confeccionados los guantes. Deben ajustarse bien pero sin apretar demasiado, porque las costuras pueden ser muy molestas al cabo de un rato de pilotaje. Tampoco deben oprimir las puntas de los dedos por el mismo motivo. Además, si os van demasiado pequeños no os permitirán agarrar bien los puños o llegar cómodamente a las manetas. Tampoco deben bailaros demasiado o corréis el riesgo de perder el contacto con el manillar o pillároslos al accionar cualquier mando. Aunque si hay un pequeño espacio entre las puntas de tus dedos y el final del guante os hará las veces de cámara de aislamiento contra el frío.

La caña del guante puede ser corta o larga. Habitualmente los de invierno suelen llevarla larga y los de verano corta, pero eso no es inamovible y depende de cada un@ elegir lo que le sea más cómodo. Eso sí, en caso de lluvia recordad que la caña va POR DENTRO de la chaqueta, así evitaréis que el agua se os escurra dentro de la ropa y de los mismos guantes, ya que podría echar a paerder las propiedades impermeables de los mismos.

En caso de lluvia la caña de los guantes la insertaremos bajo la manga

MATERIALES

El material más usado y con mejor resistencia a la abrasión es el cuero, siendo también el utilizado en circuitos y competiciones. Esto nos da una idea de la seguridad que nos aporta. El mayor inconveniente que nos presentan es la falta de impermeabilidad (a menos que no cuenten con una capa de material impermeable extra) y el posterior tiempo de secado (recordaros que si se mojan no debéis usar nunca una fuente de aire caliente para secarlos, ya que se resecarían y se agrietarían). Tampoco ofrecen una protección demasiado efectiva contra el frío, pero ofrecen un buen tacto y buena transpiración y, si están perforados, buena ventilación. Si les ponemos crema hidratante de vez en cuando nos aseguraremos de manera sencilla de que mantengan su elasticidad y propiedades.

Actualmente los materiales textiles nos proporcionan un amplio abanico de posibilidades a la hora de escoger nuestros guantes. La cordura, el Gore-Tex, Primaloft, Polartec, Thermolie, Thinsulate… estan diseñados tanto para aislarnos del frío, impermeabilizarnos u ofrecernos una buena transpiración. Los guantes textiles son una excelente opción tanto para rutas largas como para una conducción urbana, la cordura es un material muy resistente y flexible y el neopreno además es muy impermeable y el grosor de las costuras y juntas de ambos es mínimo. Hay guantes perforados y ligeros para que nos resulten cómodos, aportándonos seguridad sin sacrificar la frescura que necesitamos en verano. Para el invierno podemos contar con la protección térmica de los tejidos aislantes que se añaden a la estructura principal.

En ambos casos debemos considerar que la palma del guante debe tener una protección extra, porque es la parte que más va a sufrir, tanto por el desgaste del día a día como en una posible caida.

Además podemos encontrar guantes que combinen textil y cuero y algunos también con protecciones extra de kevlar, plástico resistente o incluso de carbono. Y si eres exigente, te recomendamos que tus guantes cuenten con un «bridge», que es una pieza de cuero o tela que une el dedo meñique al anular, mitigando la fragilidad del pequeño en un eventual arrastrón.

Si en invierno necesitárais una protección extra para el frío, todos los tejidos tecnológicos «os saben a poco» y por más borreguillo y forro calentito que tengan vuestros guantes se os congelan las manos, podéis optar por unos que sean calefactables. Éstos cuentan con unas resistencias remetidas entre las capas de tejido que se calientan, obteniendo la energía de unas pequeñas baterías acopladas al guante o incluso enchufándose a la de la moto.

Algunos disponen de unos materiales especiales que permiten utilizar dispositivos con pantallas táctiles sin necesidad de quitarse los guantes, muy útiles en rutas en las que debemos consultar el gps a menudo, por ejemplo.

Hay que destacar, pero, que cuanta más protección y aislamiento contra el frío dispongan los guantes, menos tacto y sensibilidad ofrecerán. Y al revés: los guantes con los que sentiréis más la moto y su comportamiento también os harán sentir más el frío.

es imprescindible que la palma esté reforzada

Protector palma

algunos guantes cuentan con refuerzos de plasticos resistentes

Refuerzos plásticos

Bridge

Táctiles

CONSEJOS FINALES

Habréis deducido que es imposible que unos guantes de verano os sirvan para protegeros del frío y que los de invierno son un engorro para el verano, así que se hace imprescindible tener mínimo un par para cada estación, aunque nosotros os recomendaríamos 2 pares de cada temporada porque la ley de Murphy dice que si sólo tenéis un par…va a llover, se os mojarán y no los secaréis a tiempo para la próxima vez que los necesitéis.

Otra cosa que a veces puede crear problemas es la alergia que pudiera provocaros alguno de los componentes que contienen los materiales de fabricación, concretamente el cromo, aunque eso ya se está solventando con rapidez gracias a los controles de calidad impuestos por las homologaciones.

Comprobad que las costuras de los guantes que os vayáis poner sean resistentes, estén en buenas condiciones y que cuenten sobretodo con refuerzos en la palma de los mismos.