Fabricación de un cilindro Airsal

Después de la invitación recibida por parte del fabricante Airsal de visitar su fábrica situada en Centelles (Barcelona), os vamos a explicar en esta entrada del Blog de Motoscoot como se lleva a cabo el proceso de fabricación de un cilindro Airsal de aluminio.

Aquí puedes encontrar más información sobre la fábrica Airsal y sus trabajadores.

Hablaremos de todos los pasos que son necesarios para la producción de un cilindro de aluminio, desde su diseño, pasando por la fundición, nicasilado y ajuste final.

Al final del post puedes encontrar el vídeo de nuestra visita, donde te enseñamos todos los pasos de la fabricación de un cilindro Airsal.

Cómo se fabrica un cilindro de moto Airsal

La fabricación de un cilindro de moto, de aluminio en este caso, se lleva a cabo mediante una serie de procesos, muy estrictos a nivel técnico, que Airsal gestiona de una manera muy profesional.

A continuación os informaremos de cuales son esos procesos y entraremos en detalle de cada uno de los pasos.

Diseño de un cilindro de moto

El primer paso para fabricar un cilindro de moto de esta categoría es realizar un trabajo de diseño. Para ello, los ingenieros dedican muchas horas a esta tarea. En este proceso es muy importante tener claros todos los parámetros – tanto de medidas exteriores, medidas interiores, distribución de los transfers (en cilindros de 2 tiempos), carrera de cilindro, y un largo etcétera.

Una vez esté diseñado el cilindro, tocará fabricar el molde. Para ello, se hace exactamente el “negativo” del cilindro, con la ayuda de arena compacta para los transfers. Para fabricar la arena compacta, Airsal dispone de máquinas específicas que trabajan a una cierta temperatura.

Fundición del aluminio

Una vez ya se tiene el molde y la arena compactada, toca dirigirnos al caluroso recinto de fundición de aluminio. Este apartado está compuesto por varios hornos de fundición que trabajan a una temperatura de aproximadamente 700 °C. El proceso parece sencillo, pero todo tiene su secreto. Se introducen los lingotes de aluminio en el horno hasta que quede completamente líquido. Cuando está a la temperatura ideal, con el molde colocado de manera correcta, y con la arena compactada en su lugar, se introduce el aluminio a una velocidad constante dentro del molde.

Se deja enfriar unos minutos, se realiza el proceso de apertura de los moldes y ya tenemos un cilindro “virgen” en nuestras manos.

Corte del sobrante, mandrinado y planeado del cilindro

Una vez tenemos el cilindro “virgen” recién salido del horno, o mejor dicho del molde, se realizan una serie de procesos para empezar a darle la forma correcta.

Primeramente, se retira el sobrante exterior que deja el molde, empezando a dejar ya el cilindro en su forma definitiva. Una vez nos deshacemos del aluminio sobrante, los cilindros pasan por proceso de mandrinado y planeado.

Estos procesos consisten en dejar el agujero interior del cilindro a un tamaño muy parecido al final de este, y planear la parte superior e inferior para dejar la altura correcta. Todo esto se lleva a cabo con una serie de maquinarias especializadas con una precisión milimétrica.

Limpieza

Cuando ya tenemos el cilindro con las medidas parecidas a las finales, se realiza una limpieza exhaustiva con una serie de productos químicos y una temperatura elevada. Este proceso se realiza para retirar las pequeñas imperfecciones del molde, la arena compactada de los transfers y dejar el aluminio de la forma más porosa posible, para así facilitar el agarre del Nicasil.

Agujeros y mecanizados

Cuando el cilindro ya está totalmente limpio de las pequeñas imperfecciones, se lleva a cabo el mecanizado de todos los agujeros del cilindro, como los de los espárragos, las tomas del circuito de refrigeración o las válvulas de escape. No solamente los agujeros, también se realizan las guías de las juntas tóricas.

Este proceso se ejecuta en una maquinaría de alta tecnología y de gran precisión.

Control de calidad

Una vez el cilindro ya está completamente formado, con todas las medidas que tocan y con todos los agujeros y rebabas que necesita, pasa por un proceso de control de calidad, donde se examinan rigurosamente para que todos los procesos anteriores se hayan llevado a cabo perfectamente.

Nicasilado

Este es uno de los procesos más importantes de la fabricación de un cilindro Airsal. El aluminio es un material muy blando, es decir, si lo dejamos tal cual sale del molde, con las altas temperaturas que tienen que soportar, acabarían rotos en muy poco tiempo.

Para endurecer los cilindros, se realiza el proceso conocido como Nicasilado, un recubrimiento interior con Scanimet® (Níquel – Carburo de Silicio)

Este proceso se hace en una máquina especializada con diferentes baños de distintos productos químicos a varias temperaturas.

Lapeado de cilindro

Cuando ya se tiene el cilindro Nicasilado, se lleva el proceso de lapeado. Esta operación de mecanizado consiste en frotar, con una piedra de grano muy fino, el interior del cilindro, para mejorar el acabado y disminuir la rugosidad superficial.

Control de calidad final junto a pistón

Finalmente, para completar la fabricación del cilindro Airsal, se tiene que comprobar junto al pistón que va a usarse, que todas las tolerancias queden dentro de los parámetros establecidos por los ingenieros.